=Familiares e Internos de los penales mexiquenses exigen su captura; crece el temor por ser extorsionados y amenazados
=Jesús Guadarrama Paz , alias «Chuchín» o «El Negro Gallero» e Israel López Hinojosa «El Duvalín»; son sus peligrosos lugartenientes
=»El 300″ o «El General» fue integrante de la extinta Policía Federal y actualmente controla cuatro cárceles en la entidad
Redacción Primera Plana
«El 300» o «El General», también llamado capo penitenciario, es buscado por la justicia mexicana y se suma a la lista de los generadores de violencia del Estado de México y el país.
Se presume que fue miembro de la extinta Policía Federal (PF) y actualmente es jefe de una célula criminal que controla al menos 4 cárceles del Estado de México: Barrientos, Chiconautla, Chalco, Tepachico, Otumba y otras en las que tiene compradas y controladas a las autoridades penitenciarias.
«El 300 o «El General» goza de su libertad y de las jugosas ganancias que dejan las extorsiones a reclusos y familiares , uso de teléfonos celulares y venta de droga, actividades ilícitas asignadas a dos internos que son lugartenientes: Jesús Guadarrama Paz , alias «Chuchín» o/y «El Negro Gallero» quien pertenecía al cartel de los «Los Zetas» e Israel López Hinojosa alias «El Duvalín»
Jesús Guadarrama Paz «El Chuchín» –aliado y cómplice del director del penal de Chiconautla Ecatepec, Bertín Arellano Gómez- ,fue condenado a 19 años de prisión por los delitos de homicidio, portación de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército y uso de documentación falsa, estuvo preso en el penal Chiconautla y, en 2021 internos de esa prisión enviaron una carta al expresidente Andrés Manuel López Obrador y al exgobernador Alfredo del Mazo Maza y la Corte Interamericana de Derechos con el fin de que se llevara a cabo una investigación al interior dicho penal para acabar con las extorsiones y las venta de drogas.

Los demandantes lograron quitarse encima a Jesús Guadarrama Paz quien fue trasladado al penal de Tepachico Ozumba donde hace de las suyas apadrinado por «El 300» o «El General», pero las autoridades estatales y federales hicieron caso omiso de una de las principales peticiones que era enviarlo a un Centro Federal de Readaptación Social ya que están sentenciados por delitos federales.
De nueva cuenta los internos acosados por el «El Duvalín” y “El Chuchín” que estos dos sujetos sean enviados a un penal de máxima seguridad a que cumplan sus sentencias por delitos federales.
El otro secuaz de «El 300», Israel López Hinojosa hacía de las suyas en el penal de Chalco, fue castigado y enviado al penal de Tepachico Otumba, ingresado al módulo conocido como Roca donde supuestamente sería controlado, pero los controlados fueron los custodios y comandantes de la dirección, que por fuertes cantidades de dinero le permiten gozar de ciertos privilegios como: salir de módulo para visitar otros reclusos, uso de teléfono, recibir visitas de sexoservidoras, pero lo más preocupante seguir con las extorsiones y venta de narcóticos.
Pues estas son las dos fichitas aliadas a «El 300» o «El General» quien también tiene como aliadas a organizaciones como ACME, la Agrupación de transportistas, comerciantes y anexas, a la llamada «Chokiza», al grupo Fortaleza y otras agrupaciones que han señaladas como responsables de delitos de extorsión y Marco menudeo.
Ahora son los internos del Centro Penitenciario de Readaptación Social de Otumba, Estado de México, los que ruegan que se acabe con la corrupción penitenciaria y les quiten de encima a esas personas a quienes consideran unas auténticas lacras.